En vez de hablar , relaciónese

En lugar de hablar, relaciónese
Hablar sin sentido es el hábito de pronunciar muchas palabras sin decir nada. Las personas que tienen esta actitud por lo general sienten que tienen que hacer un comentario en cualquier conversación, quizás porque le temen al silencio o sinceramente creen que hablar por hablar es mejor que no hablar.

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Un viejo dicho dice: «Es mejor guardar silencio y parecer tonto, que hablar y demostrar que lo es». Este es un consejo muy sabio, y de hecho tiene apoyo bíblico. El libro de Proverbios nos previene acerca del peligro de hablar por hablar.

Hablar sin sentido

El que aplaca el odio es de labios justos, pero el que suscita la calumnia es necio (10:8).

En las muchas palabras no falta pecado, pero el que refrena sus labios es prudente (10:19).

El que tiene conocimiento refrena sus palabras, y el de espíritu sereno es hombre prudente. Cuando calla, hasta el insensato es tenido por sabio; y el que cierra sus labios, por inteligente. (17:27, 28)

Hablar sin sentido es el hábito de pronunciar muchas palabras sin decir nada. Las personas que tienen esta actitud por lo general sienten que tienen que hacer un comentario en cualquier conversación, quizás porque le temen al silencio o sinceramente creen que hablar por hablar es mejor que no hablar. Por esta razón, este tipo de personas intercambia el silencio por conversaciones inanimadas. Interrumpen sin ningún problema. Hablan primero y piensan después (si es que lo hacen) y, durante toda su conversación, no ponen atención a lo que se dice.

Hace varios años, descubrí que es prácticamente imposible aprender algo cuando uno está hablando. Así que, en vez de llenar el vacío conversacional con frases innecesarias, utilice el tiempo con los demás para escuchar atentamente y poder comprender mejor. Haga preguntas hasta que encuentre un tema que interese de verdad a otros. Con frecuencia, la conversación dará un giro significativo. Una vez que los demás le hayan dejado entrar en su mundo, tendrá la oportunidad de aprender de la experiencia de esas personas. Notara que la conversación dejo de ser simple y ahora es una relación.

Reflexión: Cuando esta con personas, ¿el silencio le hace sentir incomodo? Describa sus pensamientos y sus sentimientos cuando esto ocurre ¿De qué forma escuchar lo que le interesa a la otra persona le hace sentir menos ansioso? Piense en algunas preguntas que pueda hacerle a alguien que conoce bien.

Adaptado del libro, Viviendo los Proverbios (Editorial Mundo Hispano, 2014). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmundohispano.org). Copyright © 2018 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.

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Es importante que entendamos que el significado es diferente al valor personal. Nuestro valor es un regalo de Dios. No podemos ganarnos Su amor, ser más valiosas para Él, o llegar a tener más valor por cualquier cosa que hagamos o dejemos de hacer. El vivir una vida con significado no afecta quienes somos ante los ojos de Dios, ni nos hace más valiosas. Somos valiosas porque Dios nos creó a Su imagen y nos ama.

El significado, es responder al amor de Dios al aceptar Su más grande regalo de amor, Cristo, y caminar con Él en la travesía de vivir una vida de significado. Vivir una vida de significado es una travesía: es la forma continua de crecer en tu relación con Dios y de vivir Su inigualable misión para ti. El camino hacia una vida de significado es vivir una vida de sentido, sustancia y propósito.

“Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica. (Efesios 2:10)

Somos hechura suya, una perla preciosa, una manualidad, una obra de arte . . . ¡Somos una historia única!

Linda verdad para crecer espiritualmente y vivir el propósito especial que Dios tiene para cada una.